Santiago de Chile.
Revista Virtual. 

Año 3
Escáner Cultural. El mundo del Arte.
Número 26.
12 de Febrero al
12 de Marzo de 2001.

AL REALISMO DESDE LA VANGUARDIA
PEDRO BERNAL TRONCOSO

Por: María Soledad Mansilla Clavel

Para la versión 26 de Escaner Cultural, reproducimos en sus páginas virtuales una interesante entrevista con el pintor Pedro Bernal Troncoso, que ya sea por la madurez de sus años, por la experiencia de los cuarenta años que lleva pintando, por lo consolidado de su obra tanto en la vanguardia como en el realismo, por la cancha y visión que otorga una larga dedicación a la docencia a nivel universitario, o simplemente por su destacada intelectualidad, es capaz de entregar una analítica y fundamentada visión de la plástica nacional, de la validez de sus acontecimientos, simultáneamente con transmitirnos parte importante de su propia experiencia y el hallazgo de la felicidad.

Cholgas, Pedro Bernal.

Amable y gentil. Una valiosa serenidad se desprende de su persona, que además de producir un ambiente cálido y naturalmente grato, reafirma una postura de espaldas a toda odiosidad, desinteresada en cuanto a posiciones personalistas, a la vez que profundamente inmersa en la plástica en general y en la educación artística de la juventud chilena.

El pintor nació en Santiago en 1935. Los años de práctica pictórica se reflejan en un determinado dominio, no solo en la técnica de la acuarela a la que se dedica últimamente, sino también en los campos formales y cromáticos, bases de la pintura, acompañados de un buen hacer en las áreas que competen a la composición, la unidad, la armonía y porqué no destacarlo, la belleza.

El artista es poseedor de una amplia preparación en su campo. Realizó estudios en la Escuela de Bellas Artes de la capital y también en la de Artes Aplicadas e Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, titulándose de profesor de Estado en Artes Plásticas y Artes Manuales. Su perfeccionamiento continuó en la Universidad de Chile donde obtiene la Licenciatura en Artes Plásticas, Mención Pintura. Posteriormente se especializó con un post grado en la Academia de Bellas Artes de Roma y en la Maestorka Radionica, con el conocido maestro Krsto Hegedusic´ en Croacia, ex Yugoslavia. Ha ejercido la docencia en la U. de Chile y la U. de Santiago y hoy por hoy dicta la cátedra de Pintura en el Depto. de Artes Plásticas de la U. Metropolitana de Ciencias de Educación.

Pedro Bernal, Otoño.

Don Pedro, ¿clasificaría su obra como un realismo?

Sí, como a un realismo expresionista.

¿Porqué expresionista?

Hay una diferencia. El expresionismo es una distorsión de la forma y del color, desde la realidad y de acuerdo al estado de ánimo del artista. Se toma un tema y se "recrea".

¿Se siente reconocido con este estilo de pintura figurativa?

Cuando el público tiene expresiones como: "Gracias por pintar Valparaíso", "Su pintura me recuerda mi barrio", "Que lindo es ver el almacén del Cerro Cordillera", eso es para mí el aplauso. Encuentro en ello una comunicación entre el público y lo que hago.

¿ Es importante el aplauso para el artista?

Sí. Y no pinto por el aplauso fácil. Me ha costado llegar a esta etapa. Estoy donde estoy después de mucho trabajo. Lo que hago hoy es lo contrario a lo que se establecía y se enseñaba, - al menos por mi profesor Ramón Vergara Grez - en los tiempos en que yo estudiaba: la plástica pura, un no al criollismo, un rechazo a lo hecho, a la tradición.

Cuéntenos de esa primera etapa de su pintura.

Por 20 años estuve en una posición estética de vanguardia: el expresionismo abstracto de Tapiés, de Canogar, de Saura y de otros que visitaron Chile y expusieron en el Museo de Arte Contemporáneo que funcionaba en la Quinta Normal, siendo Director Nemesio Antúnez. Fue la ruptura con toda la estética de esa época - años 58 al 65 -, en fin, lo mismo pasó en Italia, Alemania, Estados Unidos como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial. Hice cuadros de gran tamaño, con mucha textura, arenas, pegados, elementos no pictóricos incorporados, etc. Me encantaba el óxido de los tejados de Valparaíso, les tomaba fotografías, las ampliaba. Tuve premios importantes, como el Salón de Honor de 1970, que estaba colgado en el Museo Pascual Baburizza.

¿Cómo llegó a la figuración?

En mi caso, por pura casualidad. En el verano 81-82 recibí un llamado de mi profesor Carlos Pedraza para informarme de un nuevo concurso: "Valdivia y su río" e invitarme a participar pintando in situ. Me resistí: ¡llevaba 20 años de conceptualizaciones!. Pero me convenció. Fui a pintar al Parque Crochell, de la Isla Teja, en un día fresco, distante de los calores de Santiago, había silencio, cantos de aves, a lo lejos el río entre los árboles y la feria fluvial. Empecé a sentir un deleite, una alegría. Las cosas resultaban bien. Terminé ese cuadro. Salí a comprar más material y seguí pintando. Gané el Premio de Honor del certamen y me encontré con la felicidad.

Se quedó con la belleza...

Sí. Prefiero lo bello. Si uno como artista no tiene las recompensas materiales, que tenga al menos las espirituales. Entendí que uno no pinta para los críticos, para el público o las modas. Pinta para uno, para encontrar la belleza y ser feliz.

Bernal Troncoso, Paisaje del puerto.

Estando de vuelta el realismo en el mundo, ¿Cree Ud. que esté siendo revalorizado en nuestro país?

No. No he estado de acuerdo por ejemplo, con la forma en que se organizaron los cien últimos años de las Artes Visuales en Chile, la muestra actual del Museo de Bellas Artes. El responsable de dicha presentación es el director y no puede decir "yo me lavo las manos" y cederle la responsabilidad al curador.

Tuve la suerte de participar en la reestructuración del museo que hizo Nemesio Antúnez al término del Gobierno de Eduardo Frei Montalva y comienzos del de Salvador Allende. Se trataba de dar la mejor imagen de Chile para la UNTAD, así que se sacó lo de las bodegas y también se pidió obras a particulares.

¿Hubo diversidad de opiniones en esa oportunidad?

La Comisión para esta reorganización estuvo formada por Camilo Mori, Nemesio Antúnez, Sergio Montecinos y Victor Carvacho. Yo era el Secretario Técnico. Cuando se hablaba de la Plástica Chilena, se hacía con el peso y opiniones de las más cultas personalidades en la materia. Es lo correcto cuando se trata de hacer una antología.

¿Cuál es su mayor objeción?

Que hoy todo recae sobre una sola persona, en este caso Justo Pastor Mellado, que asumió, bajo sus únicos argumentos la selección de la pintura de nuestros cien últimos años. Pasó entonces a ser una especie de gurú donde ya no son los artistas los autores de una exposición, sino el curador. Se valoriza o desvaloriza una obra acorde a su área de gustos personales, a su posición de director en el Departamento. de Arte de la U. Católica, a sus relaciones sociales, políticas, a sus amistades. La idea es que se ha desconocido todo un caudal de consenso, de reconocimiento a valores que vienen de la época de Romera, de Ricardo Bindis, y entre otros, del mismo Milan Ivelic y Gaspar Galaz, por nuevos factores, muy personales,

¿Cuáles son las consecuencias a su juicio analítico?

Esto desorienta a los que se inician en el conocer qué es el arte chileno, porque hay un total diferente entre esta selección y la del resto de los mencionados. Además se quedan fuera valores como Pedraza, Ossandón, Barcia, Venturelli y otros. Es cosa de abrir una Historia de la Pintura Chilena y ver cuantos son los que faltan. Y los que sobran. El otro peligro lo declara José Zalaquet en la revista "Que Pasa" de Septiembre, diciendo que los artistas hoy temen decir lo que piensan para no quedar excluidos del circuito de este santón, gurú o dictador del campo del arte.

¿Conclusiones. ?

Una sola persona no es el juicio final de la plástica. Tiene que haber un consenso.

Regresemos a sus acuarelas. Tengo entendido que Ud. pintaba al óleo.

La diferencia de esta exposición con las demás es que ésta es de acuarelas. Es una técnica maravillosa que ofrece soluciones plásticas que el óleo no tiene. También hay razones de artrosis. Como la acuarela es más fluida, no me produce dolor en los dedos. Además, por sus características, es una técnica que no todos pueden manejar, hay que tener oficio, poder de síntesis. La acuarela, al revés que el óleo, hay que pensarla de claro a oscuro, hay que saber donde está la luz para ir dejando reservas al blanco. Esta capacidad es cuestión de práctica.

¿Puede explicar la presencia mayoritaria del azul en su obra?

Es el azul un color maravilloso. Me ha gustado siempre. En todas partes hay azul.

Soy un gran admirador de la llamada época azul de Picasso, por ejemplo.

Si Ud. encuentra un predominio de los tonos fríos debe ser cierto, porque cuando pinto siempre debo ir a comprar más azules.

Se nos quedó en el tintero su opinión sobre el realismo.

Hay un intelectual francés de apellido Jodidi, que después de ser ultravanguardista, se dio cuenta de que el arte actual iba directo al despeñadero porque los artistas se habían olvidado de los valores básicos de las Bellas Artes: dibujo, color, volumen y espacio.

Por otro lado, uno ve que los pintores figurativos son los que llevan la mayor parte de los avances en la plástica.

Creo que el realismo está de vuelta porque está visto que lo tan experimental, lo raro, no trasciende. En cambio, ¿quién no quisiera tener en su casa "La Viajera" de Camilo Mori?

Cada uno con su acento personal...

Por supuesto Botero, por ejemplo, mientras todos luchamos contra la balanza, él coloca a sus gordos en la tela con humor, con dulzura y con cierto sarcasmo también. El mismo Balmes y Gracia Barrios, pegando la realidad en las telas, y muchos otros. Yo mismo creí que la figuración iba a sucumbir, pero ha salido a flote con creces. Creo que no se trata de ser transgresor o tradicional. Se trata de hacer bien o mal las cosas. Se trata de ser buen o mal pintor.

Valparaíso de Bernal Troncoso.

¿Quién es buen pintor?

Buen pintor es el que cumple con los objetivos estético - plásticos propuestos. Cada artista tiene objetivos en ese orden: unidad, centro de interés, composición, ritmo, estructura... y otros muchos factores que intervienen en una obra.

¿Quién puede decir si es mejor artista Picasso o Dalí? ¿Claudio Bravo o Roberto Matta? Cada uno en su línea lo ha hecho bien. ¿Podemos decir que uno lo ha hecho mejor que el otro porque es realista o porque no lo es.

PARA ESCANER CULTURAL
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