Santiago de Chile.
Revista Virtual.
Año 7

Escáner Cultural. El mundo del Arte.
Número 73
Junio 2005

"MIDE: PRESENTE Y FUTURO DE LOS CENTROS DE ARTE Y NUEVOS MEDIOS"

ENTREVISTA CON JOSÉ RAMÓN ALCALÁ

[SEGUNDA PARTE]

Abril del 2005 Valencia. España
Entrevista con José Ramón Alcalá
Director del MIDE, Cuenca [ www.mide.uclm.es]
Catedrático de Tecnologías Artísticas Facultad de Bellas Artes de la UCLM.
Miembro del Foro de Expertos Art and Industry del Consejo de Europa

Por Sara Malinarich
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Has participado de la gestación y la trayectoria del arte electrónico, desde el Copy Art hasta los nuevos dispositivos interactivos on-line. Me gustaría que nos contaras acerca del MIDE (Museo Internacional de Electrografía), de ti como director del MIDE, fundador y pionero. No me cabe la menor duda de que después de 16 años como director de un Museo de Nuevas tecnologías nos puedes contar cuál es el futuro que tú le ves a este tipo de centros ¿Qué es lo que esperas del MIDE? ¿Vas a continuar en el MIDE? ¿Te parece que será una herencia?

Bueno, esto son siempre preguntas muy delicadas. Yo creo que en el MIDE -que tiene ya cumplidos 16 años de intensa vida-, han existido dos grandes periodos, dos grandes épocas. La época en la que yo fundo -con la ayuda desinteresada pero absolutamente fundamental de mi mujer (Amparo Gastaldo)- el MIDE. Con pasión, sin cobrar nada, donando todas las colecciones particulares o personales a las que yo tenia acceso (las propias, las de las Bienales de Electrografía y la de Alcalacanales -gracias también a la generosidad de mi compañero ya fallecido, Fernando Canales-) para formar así su colección inicial, aportando además los contactos que tenia con multinacionales (como Canon Europa) y poder así financiar el MIDE también como un centro de investigación. Esa fue una época maravillosa, fundacional, que coincide además con mi estancia familiar en Cuenca. Es decir, yo vivo, resido en Cuenca hasta casi el año 2000, y, bueno, pues esos 10 años son muy importantes para mí. Son de una gran intensidad. Durante los mismos, yo creo que el MIDE se revela como un centro, no solo pionero, sino que además, de coste = 0 euros, dando unos resultados evidentemente muy atractivos, y que son, por ejemplo (a nivel anecdótico), reseñados por el Consejo de Europa como modelo de pequeño centro deslocalizado que es capaz de hacer cosas interesantes, y que a nuestra Universidad de Castilla-La Mancha le da un evidentemente prestigio y que a nosotros -a título personal- nos ha enriquecido muchísimo.

Hay una evolución muy importante dentro de estos años, pero no voy a hablar tanto de la evolución de lo que ocurre dentro como de lo que significa el MIDE como institución. Yo creo que esos años son muy importantes. Pero, luego, por una serie de circunstancias, mi estancia en el Art Lab de Tokio y mi regreso de Japón (un año después), mis problemas familiares, el nacimiento de mis hijos, y, todavía mas importante, el desgaste que supone estar dándote cuenta de que la institución que se supone que te ampara, que te acoge, la institución madre, la universidad, pero, sobre todo la Consejeria de Castilla-La Mancha, aunque cree en ese proyecto, no lo apoya decididamente. Es decir, empieza a surgir una especie de desgaste personal importante, o sea, yo creo que el MIDE tuvo un momento ejemplar, en el que pongo como anécdota, la aparición del MIDE durante muchos minutos (mas que el Guggenheim, je,je) en el prestigioso programa de la Televisión Española "Documentos TV", "Los Museos del siglo XXI", en el que el MIDE tenia un apartado dentro del mismo como un modelo a seguir, y yo creo que eso es algo sorprendente e inédito; es decir, que un pequeño centro universitario esté junto al Guggenheim apareciendo en un programa de prestigio a nivel nacional e internacional. Pues yo cogí esa cinta y se la envié al Excmo. Sr. Presidente de la Comunidad de Castilla-La Mancha, al equipo rectoral de la UCLM, a la Excma. Sra. Presidenta de la Diputación de Cuenca, y resulta que no obtengo ninguna respuesta sobre ello de ninguno de todos ellos/as. Por esas razones (entre otras muchas más), esta primera empieza a tener para mí su continuación en una segunda fase tal vez menos interesante, que, además, se rompe de la noche a la mañana de una manera radical cuando la Diputación Provincial de Cuenca, dueña del maravilloso edificio de las Carmelitas Descalzas del siglo VXII que ocupa el MIDE desde su creación, decide, creo que en un lamentable acto de vendetta política contra el equipo rectoral de nuestra universidad, tirar al MIDE de dicho edificio. pasando entonces a ser éste la victima propiciatoria de una historia política que yo no voy a entrar a juzgar aquí, pero que al final, ha tenido como consecuencia que el MIDE, de la noche a la mañana y de una manera tan rápida como mal llevada, tengamos que trasladarnos -refugiarnos- en los bajos de la Facultad de Bellas Artes, con lo que además de no poder trabajar cómodamente, algunas obras sufrieron y se estropearon irremediablemente por culpa de ese traslado. Así que, nos dejaron sin edificio. Llevamos ya 3 años esperando un nuevo edificio. Algo muy complicado en Cuenca, teniendo en cuenta que hay que encontrar un nuevo espacio arquitectónico de esas características en la parte antigua de la ciudad (que es donde está el turismo y sus visitantes potenciales).

Sin embargo, debo observar que durante esta nueva -y lamentable- fase, el MIDE se ha desarrollado (madurado) mucho como centro de investigación, y parece que estamos ya a punto -creo yo- de asentarnos por fin en un nuevo edificio, aunque no será con el MIDE al completo, sino bicéfalamente, es decir, con el MIDE-Centro de Investigación ubicado en un moderno edificio dentro del campus universitario. Un espacio muy preparado para poder desarrollar investigación, y con unas salas de exposiciones en algún edificio del caso antiguo que permitan acoger algunas muestras de nuestros fondos, que evidentemente son tan ya tan amplias que no van a poder tener el espacio expositivo que realmente necesitarían tener.

Entonces, claro, aquí hay un momento en el que yo, a título personal y aprovechándome o beneficiándome del prestigio que el MIDE ha ido tomando, pues he ido teniendo profesionalmente una serie de encargos, de responsabilidades y de planes muy ilusionantes. Eso, unido a que ya no vivo en Cuenca (sólo trabajo aquí), pues ha hecho que, por un lado y durante esta segunda época del MIDE, haya intentado despersonalizar su dirección y gestión, intentando que tuviera un funcionamiento autónomo, que no dependiera exclusivamente de mi gestión. Así, he intentado involucrar a otros profesores, a otros compañeros, a otras personas que pudieran colaborar en la gestión de algunas secciones y servicios del MIDE y, además, intentando integrar la dinámica funcional diaria del MIDE en esas otras dinámicas particulares que yo he ido creando según me han ido ofreciendo como profesional que se dedica en cuerpo y alma a este campo artístico y que ha adquirido ya una cierta experiencia que poder transmitir -y que, en verdad puedo decir que es lo más ilusionante y enriquecedor de mi vida profesional-.

Así, y por resumir, el momento actual del MIDE es un momento complejo. Es un momento en el que, después de pasar por una época maravillosa de unos 10 años, hemos tenido que sufrir una serie de años bastante duros y complicados. No paralizantes, pero sí con un nivel de funcionamiento muy inferior al que hubiéramos deseado (y que habríamos podido afrontar), y en el peor momento posible, en el momento en que más expectativas había generado y más gente quería trabajar y desarrollar proyectos y ver exposiciones de nuestras colecciones, etc.., para llegar a un momento actual en el que, bueno, hay una encrucijada en la que la Universidad de Castilla-La Mancha debe saber si realmente asume el reto de que, finalmente, el MIDE pueda consolidarse como lo que ha estado potenciando y ofreciendo. Yo por mi cuenta y riesgo tengo otros proyectos ilusionantes que no he dejado de proyectar (y algunos incluso he podido realizar) y que en estos momentos me invitan al optimismo. Es decir, que mi evolución artística, profesional y personal ha pasado ser un artista del copy art , a estar trabajando de forma colectiva dentro de grupos interdisciplinares que desarrollan, por ejemplo, interfaces dinámicas evolutivas on-line. Lo que me ha obligado a redefinirme como artista, como creador y como profesional de la gestión de las nuevas formas artísticas (aunque esto último lo haga como sacrificio personal). Este sentido, también me apetece reseñar que, en estos momentos, el MUVIM (Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad), a través de su actual y recién nombrado equipo de dirección (con el catedrático Román de la Calle y con Francisco Molina y Carlos Pérez -que viene del Reina Sofía-), esto es, un equipo directivo tan ilusionante como competitivo, me acaba de ofrecer la posibilidad de crear un espacio para el Arte y los Nuevos Medios, que, como reto personal y profesional me apetece mucho. Está en mi ciudad, Valencia. Aceptan muy ilusionados mi versión del tema (que consiste en no hacer un simple programa de Arte Electrónico exactamente, sino construir un Laboratorio Permanente para la formación de una necesaria Cultura Interdisciplinar), pues hace que esto sea algo en lo que yo creo profundamente, y entonces, pues bueno, yo ahora me debato un poco entre esa bicefalia, ese doble funcionamiento, que consiste en que, por un lado, el MIDE funcione autónomamente y que siga teniendo la repercusión que ha tenido hasta la fecha, y que, por otro lado, pueda ir construyendo, ir creando, otros entornos; Como a Santa Teresa de Jesús, de la cual decían que lo que más le gustaba era fundar conventos (je,je. Esta es una comparación anécdotica estúpida, pero a mí me hace gracia la comparación). Es curioso que el MIDE se funde sobre la arquitectura de un antiguo convento y ahora resulta que yo me veo como necesitado de ir fundando otros conventos, ¿no es gracioso?. Pero, no cerrando los anteriores, sino creando una red de "conventos", y entonces, bueno, esta anécdota me sirve para comprender porqué en mi vida particular y personal intento siempre conjugar esta especie de esquizofrenia profesional que uno, al final, acaba teniendo, pero que, sin embargo la considero necesaria en los albores del siglo XXI. Esto es: el seguir intentado ser una persona vitalmente joven (aunque ya no tan joven físicamente), que cree que tiene suficiente energía como para trabajar lo necesario, y que ese trabajo no se desperdicie. La peor época de mi vida fue aquella en la que llegué a pensar que yo estaba trabajando al 20% de mi capacidad potencial.

Pero retomando lo importante: creo sinceramente que lo que hay que hacer es crear redes de centros -como el MIDE u otros-, propugnando una relación fluida entre los protagonistas que habitan esos centros (los estables y los trashumantes), porque hoy en día, la verdad es que el artista actual puede ser definido dentro de un colectivo que llamaríamos trashumante, ya que se pasa la vida viajando de centro en centro, de proyecto en proyecto, y yo creo que los que estamos un poco a caballo entre las dos aguas, y sobre todo, los que tenemos la responsabilidad de la gestión, tenemos que saber que eso es así y tenemos que poner toda nuestra energía en la ilusión por hacer de esto algo simbiótico, armónico, tratando por todos los medios de generar transiciones no traumáticas para este colectivo y para los propios centros.

¿Qué te gustaría en concreto que hiciese la universidad o la comunidad artística?

A mi me gustaría que el MIDE, por un lado y a nivel interno, fuera comprendido como centro eficaz, muy útil para la comunidad universitaria, y la verdad es que me temo que eso aún no ha ocurrido. Y no ha ocurrido por culpa de ambas partes. No voy a dejar pasar la oportunidad de hacer aquí una cierta autocrítica. Creo que yo tampoco he sabido conectar con el resto del personal investigador y creador de la universidad para hacerles ver que ésta era su casa. Entonces, para mi, ese es uno de los puntos débiles actuales. Un punto débil porque, mientras todos los artistas de fuera -nacionales e internacionales-, se han sentido en el MIDE como en su casa y le han sacado rendimiento, lo que ha ocurrido de puertas adentro ha sido una falta de comunicación, un falta de creer que el MIDE era también la casa de los artistas y profesores de la UCLM, y en algunos casos, porqué no decirlo, por un cierto recelo profesional, pero, en la mayoría de veces por mi actitud equivocada (propia de una exultante juventud apasionada y egocéntrica). Todos sabemos que "en casa del herrero, cuchillo de palo" y que, nunca "nadie es profeta en su tierra", ¿no? Pero esta situación debe cambiar porque es un potencial que quien menos lo ha aprovechado es quien es dueño de la casa. Entonces yo..., bueno, a mi me gustaría que eso dejase de ser así. Por parte de la comunidad universitaria y también por parte mía, es decir, madurar lo suficiente como para tener la capacidad de convencerles de que eso es así, porque realmente es así, y yo creo sinceramente que son más bien apariencias o recelos que cualquier otra cosa.

Por otra parte, a nivel institucional, a mi me gustaría que la UCLM realmente se lo tomara en serio. No vale decir "sí, qué bien, que contentos estamos con el MIDE. Le vamos a poner una medallita de la universidad al director del MIDE". No, cuando alguien me ofreció algo así, a mi me pareció como un insulto a nuestra institución, porque si tú realmente quieres reconocer que el MIDE funciona bien, no le pongas una medalla al director, ofrécele un técnico de laboratorio, o un presupuesto para hacer exposiciones, o determinado instrumental que no tenemos. Eso significa apoyo real, y esto es una critica que tengo que hacer necesariamente a la propia institución, pues sólo reconocer que después de 16 años de funcionamiento, el MIDE no tenga aún ni un solo técnico de laboratorio por contrato; que todos los que puntualmente han trabajado como técnicos, han salido de los presupuestos de los proyectos de investigación que nuestro equipo del MIDE ha conseguido de la Comunidad Europea, del Ministerio de Educación o de Cultura, de los convenios con empresas multinacionales, etc., no me parece razonable, ni le da derecho a los responsables máximos de su universidad a que digan que están encantados con el MIDE, a pesar de que en 16 años no hayan sido capaces de crear ni una sola plaza de este tipo. El MIDE tiene en la actualidad más de 4500 obras, muchas de ellas están ahora en malas condiciones (por los traslados forzosos y por la falta de presupuestos para su adecuada conservación), y todo ello, además ha sido gestionado de manera directa por alumnos con becas de 2º ciclo, que cada año cambian. No es de recibo que un gran museo no tenga un técnico archivero contratado.

Entonces, todo esto son cosas que caen por su propio peso y que le hacen a uno contestar cuando oye a los demás: "ohhh...que maravilla!!!, pues sí, mire, el MIDE es un milagro, pero los milagros tienen fecha de caducidad y entonces lo que usted no puede es seguir tirando, tirando y tirando, porque llega un momento que esto no es soportable. Si no hay una infraestructura estable, y eso es responsabilidad de la casa madre, que en este caso es la universidad (y si la universidad no puede pero le interesa, que convenza, por ejemplo, a la Diputación o al Ayuntamiento de Cuenca, o a la Consejería de Castilla-La Mancha, es decir, a las instituciones, porque, oiga, es innegable que el MIDE en sus buenos años de funcionamiento, con un edificio en condiciones, atraía un turismo de calidad totalmente diferente al turismo tradicional de Cuenca. Un turismo que venía expresamente desde los EE.UU., de Japón, de Australia, de todas partes del planeta. Por eso, creo que eso es una riqueza para el entorno en el que está ubicado el MIDE, pero es muy bonito decir, tenemos esta riqueza y qué orgullosos estamos de ella, pero a la hora de la verdad, nadie la apoya.

Yo he empezado por hacer autocrítica, pero también hay que hacer la critica necesaria. La gente tiene que saber la realidad de lo que el MIDE es, porque cuando ahora alguien quiera echarme la responsabilidad de por qué las obras no están en condiciones, o no se están exponiendo, o de por qué el MIDE lleva x años sin tal o tal, o por qué no se pueden hacer determinados proyectos, hay que describir la situación, y la situación es lo que hay, yo no puedo seguir tapando y cubriendo con mis propias espaldas lo que yo no puedo hacer. Entonces es una sensación agridulce, ¿no?, es un sentimiento realmente agridulce.

¿Cuáles son tus próximos proyectos?

Yo tengo dos proyectos, el proyecto institucional de crear el Laboratorio de Cultura Interdisciplinar en el MUVIM de Valencia (que ya he descrito anteriormente). Y, a nivel personal, creativo, mi proyecto es que salga adelante el proyecto INDEVOL, que es un proyecto que me hace mucha ilusión por ser lo último que tenemos proyectado en el MIDE y porque se trata de un proyecto interdisciplinar, con ingenieros, con informáticos, con empresas competitivas del sector. Pero, sobre todo, lo que más ilusión me hace, es que es un proyecto que vamos a realizar conjuntamente con otros compañeros de mi casa, de la Facultad de Bellas Artes de Cuenca. Un proyecto de investigación que intentar diseñar, concebir y generar prototipos de interfaces dinámicas evolutivas on line y para sistemas de navegación tipo PDAs. Me parece un campo fascinante de acción, que afecta profundamente a esa descripción que he hecho anteriormente sobre el estatus quo de las interfaces informáticas y los sistemas inteligentes de navegación. Me parece que todavía hay un déficit absoluto de lo que significa usabilidad, ergonomía y diseño, y yo creo que en ese campo tenemos mucho que hacer. Entonces, hemos solicitado -por separado- al Ministerio de Educación español y a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la realización de unos proyectos que considero de gran interés; entre otras cosas, porque supone estrenar una situación tremendamente deseable: la incorporación de los artistas, diseñadores y creadores a los grupos científicos interdisciplinares. Por ello, en ese sentido, y si nos lo conceden, (algo que sabremos dentro de un mes como mucho), este será mi siguiente proyecto creativo en el que me voy a involucrar en cuerpo y alma.

¿Y la realización de este proyecto cuánto tiempo tomaría?

La realización de la fase 1 -que daría soluciones a los objetivos principales planteados en este proyecto- seria de dos años, dos años de trabajo intensivo.

Entonces, ¿no crees tú que un proyecto de estas características debería ser planteado para que se desarrollara de una manera más prolongada en el tiempo?

No, por una razón (y esto atiende también a razones de pura eficacia): el Ministerio de Educación y Ciencia español exige en estos momentos a través de la normativa vigente para el desarrollo de proyectos de I+D+i que el investigador principal, el coordinador de un proyecto, sólo puede liderar un I+D+i al mismo tiempo, por lo tanto, si tú te hipotecas para muchos años, puede ser que al final eso te pese y no puedas seguir evolucionando.

Además, existen otras razones que hemos aprendido con la experiencia y es el hecho de que hoy en día las cosas evolucionan a un ritmo vertiginoso y lo que hoy puede ser de tremendo interés, tan vez pasado mañana dejen de tenerlo. Es como lo de escribir libros. Teniendo la eficacia y la instantaneidad y ubicuidad de la red Internet, resulta muy complicado y arriesgado encerrarse durante varios años para publicar en la tecnología del papel y con la distribución tradicional un volumen que, tiene complicado el mantenerse vigente por años. A mí me gusta más Internet, al margen que soporta lenguajes Hipermedia e interactivos que siempre se adaptan mejor a los contenidos que yo manejo.

En resumen, y por no aburrir más a la audiencia, creo que tenemos por delante un futuro muy ilusionante y prometedor, lleno de expectativas y con la enorme experiencia acumulada (con lo positivo y lo negativo) para ayudarnos a intentar ir por el sendero más apropiado, lo que ya es mucho, pues esto a veces resulta lo más difícil (¡qué claro lo ves cuando estás en la enseñanza!).

Me parece que al artista y a lo creacional les toca ahora vivir una época extraordinaria. Llena de riesgo, de incógnitas, llena de retos. Deben re-pensarse, re-definirse, deben mirar hacia el inmediato pasado, pero también hacia el pasado más lejano para crear los necesarios enlaces, para no sentirse huérfanos. A mí, desde luego, como creador, me apetece mucho formar parte de este gran proyecto de nuestra civilización y me halaga que se nos vea como instrumentos necesarios e indispensables para acometer estos cambios.

 

Leer primera parte de la entrevista

 

 



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