| Santiago
de Chile. Revista Virtual. Año 7 |
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Número 69 Enero y Febrero 2005 |
DIEZ POEMAS PARA
INICIAR EL AÑO
FIR, TAO, Yván Silén, Karina Sacerdote, Maurizio Medo, Carlos Camilo Ibarra, Alba Marina,
Miguel Angel de Boer, Ricardo Castro, Salomón Valderrama Cruz
FIR
Dentadura
La muerte me necesita, me llama.Me mira desde la ventana
y sonríe.....
con su dentadura fatal.
TAO
"CABALLO BLANCO"
Lo cubre niebla brumosa,
Grisáceo manto lo envuelve.
Como línea se lo advierte pasar
Con galana gracia;
Camina entre tronco y ramas
En un bosque quejumbroso
Entre telas, luces, sombras
De un sudario con mil tramas...
Él busca un cuerpo sin dueño
Para su alma desgarrada
Que hoy es sólo nube y sueño
Para anclar desesperada.
Caballo blanco que avanza
Blanco entre todos los blancos
Con el trotar de sus cascos
Y esa última esperanza.
Caballo blanco, caballoPura sangre, sangre blanca,
De blanco perdido encaje
Y pura elegancia nata;
Su garbo es todo el bagaje
Que dibuja con sus patas,
Y sueña todos los sueños
Que se sueñan sin palabras.
Puro aire es el espacioEscenario de las almas
Encadenada a las gradas
Entre nubes, en la calma;
Sin nada que la contenga,
Separada, sin materia;
Sin su alma teatralizada,
Caballo blanco es...
/Mi alma.
Yván Silén:
IvanElsa@aol.com
Te voyeuriso
Te voyeuriso con mi lengua de dios
en tus palabras delicadas. Te
voyeuriso con mi falo en tu sorpresa.
Por los días tristes del otoño, por
las veredas deshojadas de la muerte.
Te voyeuriso en mis poemas que te
besan sin tú saberlo. Mis poemas que
te lamen sin tú soñarlo. Los poemas
que te violan sin tú decirlo. Te voyeuriso
cuando t'enjabonas vestida y cuando
lavas tu pequeña muerte en la letrina.
Te voyeuriso cuando estás enamorada
o cuando te masturbas o rezas
en esos días en que te ausentas del espejo.
*****
26 de diciembre del 2004
Nueva York
Karina Sacerdote
http://es.geocities.com/anirakar2002/
http://es.geocities.com/azulypalabras/karinasacerdote.html
INEVITABLE EL LABIO
inevitable el labio
el que se sabe dios
hormiguero de mañanas
apacible bufón de naufragios
entelequia de abismo solo
el que ama
ese
el tuyo
el que besa
besos de intrépida rompiente
ese labio inferior que es nirvana
cuando roza sutilmente
como capullo rabioso
errante
mi
boca
© Derechos registrados
Maurizio Medo
almuerzo familiar
En soledad rememoro a la familia. Capturo imágenes de alborotados rituales, detalles apócrifos en el álbum y algo de bellos días.
Los domingos mi padre era tan mudo como el Rey de los naipes, mamá un eclipse hermosamente entristecido y, mi nonno, preocupado se velaba bajo el humo de sus Winston. Reía de sí mismo y también se enojaba, siempre consigo mismo. Mi nonna fue un adorable cataclismo. Daba de comer a dos gatos y medio millón de pájaros. Se detenía a retratar este o aquel detalle, o recordaba esos otros domingos en su Italia entrañable.
Sólo Tita solía interrumpirle...
Cómo bullía el aire entre ajos y cebollas, ritornellos, tarantelas y el ensordecedor grito de la prole.
Luego, Tita, mi hermana, escrutaba la expresión melancólica del rostro de mamá. Entristecía y ambos nos contemplábamos, cómplices, añorando estar ausentes.
Aún no recuerdo cómo ella después reía.
Reían todos.
Loca como las aves era la niña.
Pero si sus ojos hallaban el cartónrostro de mi padre
caíase la niñez dentro del plato.
Yo también tenía uno.
Me preocupaba por saber cuántos arroces cabrían dentro de él, las arverjitas. Contemplaba ensimismado la textura tramada del asado fantaseando con míticas cartografías.
Y callado, siempre callado junto a toda la familia, ya pensaba cómo sería eso de comer y dormir solo.
Sólo contigo,
Soledad
Carlos Camilo Ibarra
0108
MI MEDIA ALTURA DE VIDA
ESTA CORRIENDO POR EL PASILLO
SE VA RIENDO EN CADA RINCON
INDICANDO SUS COSAS AL DESPEDIRSE
LA ALTURA MEDIA QUE HOY TIENE MI VIDA
ESTA COMENZANDO A PREGUNTAR CON ESE ESTRIBILLO
NORMAL Y CONSCIENTE QUE TIENE POR CONDICION
ALEGRAR MI CASA, ALEGRAR MI MENTE, ALEGRAR MI ESPIRITU
ESTA VIDA QUE ESTA A MI MEDIA ALTURA
PROPONE CON SUS OJOS, ORDENA CON SUS LATIDOS
JUEGOS QUE A NADIE CANSA Y ES DE TODOS LA ATENCION
PARA ENTREGAR SONRISAS, PARA RECOGER SU PORVENIR
SI MI ALTURA MEDIA SE COMPUSIERA
DE TODOS SUS GESTOS, DE TODOS SUS BRILLOS
TAL VEZ DE ALGUNA PESTAÑA, TAL VEZ DE ALGUNA FICCION
ME LLENARIA ESTE CORAZON
SI MI MEDIA ALTURA SE DISTRAE
MI SOMBRA LO SOCORRE COMO LAZARILLO
MI SANGRE SE MUEVE CON AGITACION
TRATANDO DE DAR BASES DE CONSECUENCIA
LA MEDIA ALTURA DE VIDA MÍA
CORRE DE UN LADO A OTRO
RÍE SIN PENSAR (CREO) EN SU FUTURO
ME MIRA, ME TOCA
JUEGA, GOLPEA, RASGUÑA,
DEJANDO
CON SUS DOS PEQUEÑOS LAGOS
LAZOS QUE NOS UNEN POR SEGUNDOS
INSTANTES PERCIBIDOS SOLO POR LOS SILBIDOS
QUE SE VAN ESCUCHANDO DENTRO DE CADA CORAZON
LA ESPERANZA QUE SE APOYA EN MI ESPALDA
VA DANDO LA CONFIANZA PARA ESPERAR
AQUELLOS TIEMPOS MALOS
DE ESTOS MOMENTOS BUENOS
MI ALTURA DE MEDIA VIDA
ALCANZA A MIRAR SOBRE EL LIMITE
QUE VAN FORMANDO LOS PASTOS VERDES
MIDIENDO SU DISTANCIA CON LA DEL AEROPLANO
GRITANDO QUE ES LIBRE, CORRIENDO POR SER FELIZ
Alba Marina
albamarina1@yahoo.com. a r
En el espacio infinito
canta a la existencia
un alma desprendida
del cuerpo inerte
que devendrá en arenas
que verá cuatro soles
que sentirá
a Jesús
a David
en Dios
en el alumbramiento
de seis relámpagos
Otra existencia después
de parirme y vivir del mismo aire
por casi 90 años
Un beso en su pecho antes del final
y el cuerpo quedó con los dos jazmines primeros
dentro de una caja grande en lo más alto
el alma no sé si se dio cuenta
de las arenas
de los 4 soles
de la estrella de David
de los seis relámpagos
porque me parece que fue todo al mismo tiempo
o no tiempo
sin un antes... sin ningún después
con todos los antes... con todos los después
de la descendencia .... el Todo y la Nada
componiendo y descomponiendo
para la armonía
en silencio.
Miguel Angel de Boer
AMIGA
Fui a conquistarte
siendo un niño asustado
y me recibiste
sin tenerme en cuenta
Me hiciste crecer
a los golpes
y porque no
a las caricias
Te conocí de a poco
y me conociste
a los saltos
(Conocerte fue conocerme
y me dejaste
abandonado)
Te amé con toda mi vida
Te odié con toda mi alma
Me diste tanto
y me quitaste
todo
Yo fui vos
y vos fuiste
yo
Y aún recuerdo tu luna
tus fríos
tu regazo
Me alentaste
y perseguiste
Te canté
y me cantaste
Me hiciste hombre
me empequeñeciste
Supe del horror
y la esperanza
Y quise olvidarme de vos
olvidándome
de mi
sin poder
Y en mis noches de duelo
que son también de regocijo
porque aún no muero
(y he muerto tantas veces que ni yo lo creo)
mi corazón me dice que
Córdoba amiga
todavía
te quiero.
Comodoro Rivadavia, Julio de 1986.
Ricardo Castro
Alas olas
Estoy al lado del mar sobre la arena que vuela
bájo el sol que ilumina lo que escribo.
El viento se opone alas olas que se dejan caer en la orilla
repartíendose en espumas.
La familía humana se alimenta
tres niños a saltitos se acercan al agua que suave los recibe
albatros planea algo al nivel del mar
los botes que descansan en la noche son las camas
de las gaviotas que cierran los ojos a la luna.
Poco a poco desaparezco tragado por la tíbia arena dorada
me sumerjo en la oscuridad bajo la luz del sol
las nubes negras cubren las lunas brillantes
la brisa usa mi pelo como instrumento y me silba su sentido músical
he ahí la monótona música del agua
el sonido salado de la pequeña bahía.
El viento me llena de arena los ojos me cubre de arena la piel.
Salomón Valderrama Cruz
eljuguetequees@latinmail.com
"El juguete que es la palabra"
[Me miran los ojos el cielo
Despertar sin vértebras sin estructura
La piel está en su eternidad
Se suaviza hasta perderse en la memoria
Existía no existía
Emilio Adolfo Westphalen]
La palabra juega
Para sí misma
Como juegan
En sus juegos
Las bestias sin palabras
En la ruta del pájaro
Que siempre es él
Como pájaro ajeno a la palabra
Entonces la palabra
Se revuelca de memoria
Como se revuelcan los que acaban
Olvidando las palabras
En el poema del viejo cantor
El eternamente joven
-Que ya parece despistado-
En la imprecación
Se transforma
Un llamado sencillo
Que no perdona el olvido
Que no ahoga las lágrimas
En una despedida sorda y ciega
Ya para entonces Muda
Como la misma palabra
La que se aleja
De la bestia
De su juego
Del miedo de ser
Olvidada
Ella misma se inventa en la guerra
Ella misma es el invento que juega
Tan vieja
Como la misma palabra -palabra-
Como la misma guerra -guerra-
Como el mismo hombre -hombre-
Como la misma bestia -bestia-
Y los niños también juegan
-Los niños juegan a la guerra-
Con sus juguetes
Petálicos, fálicos...
De hombres
Hacen la guerra
Donde juegan
Con sus juguetes
Metálicos, matálicos...
Y donde la guerra fue juego
Ahora ya es el juguete
Del niño viejo
Aquel que quiere inventar la última palabra
Fin.
Para las personas que desean publicar: deben enviar sus escritos
en formato de documento de Word, diseño de página Normal y breves datos biográficos.
Ni se les ocurra enviar libros, pueden hacerme llegar dos o tres poemas no más por favor. Gracias.
Marcela Rosen, encargada de la evaluación y publicación de poesía en Escáner Cultural. aldocumentar@lycos.es
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