Música - Escáner Cultural, Revista Virtual.

EL REGRESO DE LOS TR3S
COMO ANTES, MÁS QUE ANTES, COMO AYER

Henríquez, Lindl y Parra nuevamente juntos en un estudio de grabación. Después de seis años de receso, los integrantes de la banda nacional más importante de los noventa y por qué no de la historia criolla, vuelven a unir sus instrumentos. Con Molina marginado y distanciado. No por negocio, como sus antecesores, con disco nuevo bajo el brazo. Con discurso y carreras paralelas totalmente vigentes.

La nublada tarde del 4 de Abril de 2000 está en la memoria de los fanáticos de la música nacional. La productora Romero & Capmbell en un escueto comunicado anunciaba el receso indefinido de los Tr3s. Sin mayores precisiones, sólo lo recomendable en este tipo de casos, como la búsqueda de nuevos rumbos y la experimentación con otros sonidos. Sobre las verdaderas razones se hablaría mucho en los años posteriores.

Luego vinieron la serie de conciertos de despedida que culminaron el Sábado 27 de Mayo de 2000 en Concepción. Su tierra natal les brindaba la última ovación a una historia y a una carrera llena de éxitos, les daba las gracias por recordarnos que la guitarra de palo podía sonar más fuerte y potente que una eléctrica y que la "cueca chora" tenía alma y sólo había que mirar hacía atrás.

GATO POR LIEBRE

De reencuentros ya sabemos bastantes. La segundas partes no son buenas. Más que conocido. La expectación por la nueva etapa de Los Prisioneros, provocó un Estadio Nacional repleto varias veces, mejor dicho, como pocas veces. Se esperaba una incitante, deslenguada y nueva versión de un Jorge González que volvía a buscar el trono dejado hace algunos años.

Lo distinto del contexto social y el principal enemigo decadente, provocaron un triste capitulo que llevó por ejemplo a suspender una gira nacional en compañía de Café Tacuba, por la baja venta de entradas y a invitar a Kristell, si la niñita del ombligo de Rojo, que conduce el insoportable Rafael Araneda, para participar en uno de sus videos. Material imperdible y de colección de cualquier fiesta Kitsch en algunos años más. Simplemente una pena. Prisioneros de su historia.

La gran ventaja de los integrantes de Los Tr3s, es que nunca dejaron la música, continuaron con una carrera impecable. Atributos que hacen pensar en un regreso a la altura y no un recuerdo agónico de un tiempo que ya pasó y no volverá.

Tras el fin de Los Tr3s, Álvaro Henríquez siguió potenciando su carrera de productor musical con el disco "Canción de Lejos" de sus coterráneos e hijos naturales Los Bunkers. Después se armó una banda a medida y le puso como nombre, su segundo apellido. Suma y sigue. Así editó su primer disco homónimo como solista, donde experimento con la ranchera y coqueteó con el bolero cebollento y homicida de los sesenta y como si fuera poco, colaboró en el segundo disco como solista de Joselo Rangel y produjo la reinvención de José Alfredo Fuentes.

Una carrera que perfila a Henríquez como unos de los músicos más importantes en la historia de la música chilena, por el rescate de nuestra cultura popular y por entregar importantes dosis de buenas letras y grandes composiciones. ¿Quién no reconoce su sonido?.

Lindl y Parra no se quedaron atrás. Juntos continuaron con Ángel Parra Trío, tratando de satisfacer, esa necesidad casi natural de jazz . Un jazz tan chileno como la propia cueca, llena de swing y de baile.

Por separado Lindl editó "Una Noche en el Cinzano", con olor a tinto y a chorrillana se acompañó de los músicos del puerto, en un registro histórico de la cultura popular. Después se metió con el scratch de Bitman y las secuencias de Roban, siendo parte activa de su último disco "Música para después de Almuerzo". Por su parte, Ángel volvió a impartir clases de música, tratando de traspasar su experiencia a las nuevas generaciones.

EL MARGINADO

La exclusión de Francisco Molina en la batería quizás explica en cierta forma, una de las razones de la disolución de la banda a principios de siglo. Las relaciones personales entre los integrantes no eran de las mejores. La lucha de egos y el tener que compartir tanto tiempo, desgastaron la amistad.

Seis años al parecer parecen pocos. Molina dejó "Los Titulares", su banda de jazz, para perfeccionar su técnica, en el Berklee College en Boston, Estados Unidos. Casi no tiene contacto con Chile. El único, su amigo y también baterista Pedro Greene señaló a La Nación Domingo, que la reunión de sus ex compañeros lo tiene sin cuidado. Su mala y desgastada relación con sus antiguos amigos motivaron la exclusión.

La rutina diaria de Pancho en el país del norte, es totalmente dedicada a la música, por la mañana de 8 a 14, teoría en clases y después a la práctica, hasta altas horas de la madrugada. Allá comparte con Daniel Pérez, otro baterista chileno, con quien realiza "jam sesions" y visita los principales clubes de jazz de Boston, cuenta Greene.

En la nueva conformación de Los Tr3s, su lugar será ocupado por Manuel Basualto, hermano de Mauricio, actual baterista de Los Bunkers, con quien Álvaro ya trabajó en la grabación de su disco solista y en los proyectos que sucedieron al homónimo.

RUMBO A NUEVA YORK

Antes de la noticia del regreso, la banda ya trabajaba en las nuevas canciones, cuyas letras fueron realizadas casi en su totalidad por Henríquez. El disco tendría diez temas originales, más dos cuecas y un cover de Roberto Parra.

Durante los últimos días de Marzo, la banda debería estar viajando a los Estados Unidos para grabar todo el material, en compañía de un viejo amigo. Joe Blaney, el mismo productor de sus últimas dos producciones, (Fome 1997 y La Sangre en el Cuerpo 2000 ), junto al norteamericano, la agrupación espera dar las últimas pinceladas del que será el décimo disco en la trayectoria de la banda oriunda de Concepción.

Para La Oreja, su nuevo sello discográfico, el primer single debería estar sonando en las radios a mediados de Abril, mientras que el disco aparecería por las estanterías nacionales a principios de Mayo. La vuelta a los escenarios está programa para el mes de Junio con gira nacional incluida.

Los Tr3s vuelven a escena, totalmente renovados, con un pasado que los avala y aparentemente con las disputas de antaño olvidadas. Sólo tocar, cantar y rockear. Como la primera vez, como antes, más que antes, como ayer...