Santiago de Chile.
Revista Virtual.
Año 1  
Escáner Cultural. El mundo del Arte.
Número 7.
12 de Julio
al 12 de Agosto
de 1999.

EJE 5 6 7 8 9 = 5
PAULA RUBIO

 

Son dos conocidas escultoras chilenas que exponen en la Posada del Corregidor (Santiago), tuvimos el placer de entrevistarlas...

 


Ana María Wynecken nació en 1961, estudió Arquitectura en la Universidad de Chile de Valparaíso, fotografía profesional también en Valparaíso y luego escultura en el Bellas Artes de Viña. Finalmente hace su Licenciatura en Artes Plásticas en la Universidad de Chile, con mención en escultura.

Detalles de esculturas de Ana María Wynecken.¿Ha influido la arquitectura en tu trabajo?

Sí, de todas maneras, siempre me ha gustado influenciar con mi trabajo los espacios, crear ambientes, atmósferas, colores, ojalá se pudieran atravesar, participar de ellos. Siempre me ha interesado el espacio, no el objeto en sí. No es una escultura que se pone en un lugar, es intervenir directamente el espacio.

Cuéntame un poco cómo empezó todo esto, tu escultura en general, tu camino...

Siempre supe que quería estudiar escultura, pero entré a estudiar arquitectura por presiones escolares y familiares, estuve cuatros años ahí, pero no soporté tanto y cuando hice escultura hice lo que siempre pensé hacer, la cosa de intervenir los espacios, de construir. Las que hice en la universidad de Chile eran verdaderas construcciones.

Descríbeme un poco cómo eran...

Eran bloques, adobones grandes, todos iguales, se iban sumando, por adición, como un constructivismo, iba poniendo uno sobre otro y se iban formando estructuras grandes, altas de dos metros y tanto, se podían sentar sobre ellas. En 1988 dejé en la escuela mi escultura más grande, que fue la más top, marcó el inicio de mi carrera.

¿Llamó bastante la atención?

Sí, Marcela Trujillo, por ejemplo pintó sobre ellos, los intervino, tenían formas de animales, uno se podía sentar sobre ellos, y luego llegó otra generación, la de Leo Moya y ellos también hicieron cosas con lo que iba quedando de éstos. En invierno les crecía pasto, porque estaban en el jardín y crecieron enredaderas, con la lluvia se fueron derruyendo, derruyendo y al final desaparecieron.

¿Hiciste un trabajo fotográfico de eso?

Sí.

NACIENTE, escultura de Ana María Wynecken.¿Y luego?

Bueno, al principio sufría mucho porque estos eran adobones pesadísimos, necesitaba al menos diez amigos para que me ayudaran a moverlos, era poco independiente en el momento de instalar o de armar, con el tiempo fui encontrando nuevas técnicas, ahora is esculturas son mucho más livianas, porque ahora uso estructuras interiores, estructuras metálicas, mallas, gasa, ahora yo las puedo tomar, son livianas, están mucho más tecnológicas, he incorporado la luz, la electricidad, el agua, las espigas y el pasto. Me he liberado, en el sentido de que si tengo que usar un motor, lo hago (una bomba de agua para que esta fuente funcione por ejemplo).

¿Al principio te costaba integrar estos elementos?

Claro, encontraba que no encajaban, ahora me doy cuenta que son necesarios, por lo tanto amo la tecnología, la computación, los adelantos, la modernidad. Ahora estoy reflexionando lo que vi en el siglo XX, a punto del 2.000, confrontándolo con las huellas de nuestro origen, lo arcaico, lo primigenio, en el fondo lo que quiero es rescatar lo más elemental, lo más primitivo, lo esencial, como la tierra y actualizarla, que las personas la valoren, es increíble todo lo que se puede hacer con ella.

¿Tú siempre trabajas con tierra?

Con semillas, con tierra, con piedrecillas, o sea, elementos naturales.

¿Tiene una relación con la ecología?

Nunca fue a conciencia, la gente cuando veía mis cosas o escribía sobre mí, le ponían eso, yo ahí dije: ¡bah! ¿Seré ecológica? En el fondo sí, soy ecológica, pero no lo hago para decir: ¡sean ecológicos! Si no que yo soy así, amo la vida, me carga la destrucción y no podría hacer algo que atentara contra eso.

¿Tú crees que ser artista mujer es más complicado o es lo mismo que ser hombre?

Yo creo que es lo mismo, tal vez es más complicado por los hijos, pero creo que ahora los hombres atinan más con esa parte, los dos tienen que trabajar, creo que es igual, igual de sacrificado, el arte es sacrificado en este país, sea hombre o mujer. Igual yo trabajo en otra cosa.

¿Eso de tener un trabajo paralelo te ayuda en tu trabajo artístico?

Claro, porque no estoy obligada a vender mi obra, o sea yo soy libre, puedo hacer lo que quiera y puedo darme el lujo de hacer esculturas de barro, no estoy presionada por lo comercial y eso ha sido genial, porque tal vez si no hubiera sido libre no podría hacer lo que estoy haciendo. Ni siquiera estaría aquí.

¿Estarías haciendo otra cosa?

No estaría haciendo, porque esto es lo que tenía que hacer. Por ejemplo esa escultura que ves ahí, que se llama naciente, surgió de la necesidad de iluminación, en realidad son dos partes que forman una escultura, como una pequeña instalación, porque son dos seres que están interactuando, uno ilumina al otro porque la luz sale de uno hacia el otro, éste tiene las espigas que tienen trigo, una parte de espigas con trigo y otra parte sin, y eso es porque quiero representar la semilla que va a nacer gracias a la luz que le da el otro ser. Para mi la luz es trascendental, uno en la vida debe tratar de iluminarse en el ámbito mental, esto demuestra la posibilidad de nacer, estar siempre creciendo, gracias a la luz, gracias al apoyo, a la solidaridad, a relacionarse, vivir y ser parte del mundo.

¿Has escuchado la Alegoría de la Caverna, de Platón?

Sí, eso es, eso es. Basta un rayito para que uno se haga rebelde. Yo creo que el arte es importante por eso, son luces, la persona viene y ve y algo le pasa y ojalá que lo que e pase con mi obra sea algo consigo mismo, profundo, que saque su luz, porque todos los humanos tienen luz y oscuridad adentro.


Caja o módulo para la obra Fierro Patinado, de Paula Rubio.Paula Rubio comienza en 1983 sus estudios en Licenciatura en Artes Plásticas, realiza un taller con Patricia del Canto y otro con Juan Egenau. En 1990 se titula con mención en escultura en la Universidad de Chile. Tiene una gran cantidad de exposiciones a su haber.

¿Cómo empezó esto del arte?

Empecé estudiando en la Universidad Católica, luego me cambié a la Universidad de Chile, porque en la Católica cerraron escultura, y además encontraba mejor la Universidad de Chile en cuanto a talleres, además estaba Juan Egenau, que trabajaba bien el metal. Me interesaba la fundición, más que la fragua o el fierro en frío. Aunque en esta exposición hay pocas cosas fundidas, así es como comencé.

¿Había un ambiente propicio para la escultura en la "Escuela" en ese momento?

Yo encuentro que sí, que había mucho movimiento escultórico en ese momento en la "Escuela", soy de la misma generación de la Norma Ramírez, por ejemplo, era la época de los milicos, se producía una cosa bastante interesante, una cosa más contestataria y nosotros estuvimos ahí; por otro lado, a veces no pasaba nada, porque habían paros, vacaciones forzadas, fue una época difícil, pero por lo mismo se formaban movimientos dentro del alumnado más potentes.

¿Se puede resumir un poco tu historia escultórica?

Desde un principio fue metal, comencé con fundición, luego los materiales se fueron ampliando, fierro frío, soldadura, lo que es la pieza encontrada, piezas industriales.

Fierro Patinado de Paula Rubio¿Desde un principio fue una obra de corte conceptual?

Sí, el periodo figurativo fue muy corto, el de alumno básicamente, ya en cuarto año era más reflexión, formas geométricas muy puras, abordo la escultura de una manera bastante intuitiva y muy íntima. Voy siguiendo mi trayectoria lo más libre que puedo, lo más concentrada en algo interno que me lleva a las formas, ese es el acercamiento que tengo al volumen, el espacio donde voy a exponer también me motiva bastante.

¿El aspecto más conceptual de tu obra lo tienes digerido?

No totalmente. Primero trabajo instintivamente y a medida que el trabajo avanza voy conceptualizando, al final se me amarra todo bastante perfectamente, pero lo abordo al revés. No siento que lo mío sea tan conceptual, porque hay una cosa de la forma, de la factura que me interesa mucho y creo que eso se aleja del arte conceptual, por ejemplo este mismo trabajo, el de las tramas, es como un juego vibratorio, la trama está proyectada sobre el cuadro, hay tramas reales y tramas virtuales, la trama virtual son los puntos de luz proyectados por un foco especial. Es un juego de formas abiertas, hay algunas cajas que están abiertas y otras cerradas en la parte de sus perforaciones, es bastante sutil, algunos cajas van perforadas por el costado y otras no. La idea es que esto fuera un trozo de algo mayor, como una trama infinita. Un juego de composición donde se van como moviendo las cosas.

TAT,TVAN,ASI / ESO ERES TU, escultura de Paula Rubio.¿Y esas partes que se ven como oxidadas?

Sí, hay tres gamas de colores, muy sutiles, los colores están dados por patinas naturales del fierro, el patinado es un oxidado tratado con ácido. Esto tiene que ver con las matemáticas, con coordenadas... una especie de orden natural del universo. Lo que quería hacer eran tres trabajos enormes.

¿Cómo es eso los materiales encontrados?

Se trata de buscar material de deshecho, pero industrial, grande, tengo lugares donde los puedo buscar. Los trato de dejar casi tal cual, el mayor trabajo es de limpieza, la intervención que hago es muy sutil.

¿Y está integración de texto sobre el metal?

Este trabajo es de planchas de aluminio, también está tratada la textura con ácidos, tratando de asemejar mapas, hay un trabajo de gráfica fuerte, y las letras grandes son de piedra, los otros textos son grabados en metal.

 

Si quieres escribir a Ana María puedes hacerlo a: wynecken@yahoo.com, si quieres escribir a Paula: paularubio@yahoo.com

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