Escáner Cultural, Revista Virtual.

Obra de Elisa Naranjo.

Elisa Naranjo, destacada escultora chilena nos obsequia con su última exposición "Entre Nidos y Colmenas". Es licenciada en Arte de la Universidad de Chile y ha expuesto tanto en salas importantes, como en lugares lejanos al epicentro artístico, siempre con el mismo profesionalismo y entrega a su trabajo, tomando cada una de sus obras con una notoria y encantadora seriedad

Esta vez presenta su obra en la Galería Palma Valdés, fue un éxito rotundo. Más comentarios no se pueden hacer. El resto es sólo mirar. Si se encuentra muy lejos de Santiago de Chile, puede ver una referencia de su obra en: www.artelatino.com/naranjo

¿Cómo definiría su infancia?

Tímida, retraída, lúcida y demasiado corta.

Entre mundos (catálogo).

¿Dónde estudió y con quién?

En la Universidad de Chile, la profesora que realmente me formó, fue Patricia Del Canto. Juan Egenau estuvo entre mis profesores. También puedo decir que fue muy importante Adolfo Couve.

¿Cuándo descubrió que su destino era el arte?

Desde muy niña. Cuando entré al colegio. O antes. Fue antes.

¿Le gustaría hablar de algún artista que haya tocado fondo en usted?

Muchos en general y ninguno en particular. Me retroalimento de los escultores de mi generación. También ciertas culturas indígenas, americanas y africanas.

Si hay que mencionar a alguien, debería comenzar por Mario Irarrázaval y Nora Correas.

Reconociendose.

¿Se identifica con algún estilo o con alguna generación de escultores en especial?

Con la generación actual de escultores chilenos que oscila entre los 30 y 50 años, por ejemplo: Alejandra Rudolf, Ana María Wynecken, Norma Ramírez y Paula Rubio.

Hábleme un poco de la evolución de su trabajo.

Creo que ahora está más sólido y menos rígido. Durante un tiempo abandoné los metales porque me saturaron, y experimenté las mezclas de diversos materiales orgánicos y estoy incursionando con mucho interés en las instalaciones. En la exposición actual retomé el aluminio fundido y ahora lo disfruto más, pienso que domino más el medio, por lo que se me hace más liviano en cuanto a esfuerzo físico.

Mangosta.

¿Está trabajando en algún proyecto ahora?

Varios paralelos, en instalaciones espaciales, que tienen que ver con la estética del arte, el espíritu y pensamiento, pero también me interesa la obra objeto, que se vende y cumple una función decorativa. No por eso más fácil ni menos valiosa, es sólo que me interesa trabajar en todos los ámbitos y lenguajes de la escultura, ya que ésta es una sola.

¿Qué sentido tiene ser artista para usted?

Es algo que le da sentido a mi vida. No creo que sea una decisión que uno toma, si debo o no debo hacerlo, es algo que simplemente que no puedo dejar de hacer. Cada vez que he intentado salir del trabajo artístico, la vida me devuelve a esto. En dónde soy más feliz que haciendo ninguna otra cosa.

¿ Le gusta comunicarse con la gente que admira su trabajo?

Sí, me gusta.

¿Qué le aconsejaría a los artistas más jóvenes?

Que trabajen. Que no se vayan por el camino fácil, porque en los caminos difíciles es donde realmente se aprende.

Amurallados.

Si pensamos que mucha de su obra quedará en manos de particulares que tienen el poder adquisitivo como para poseerlas, ¿eso produce algún conflicto en usted, cómo un frenar la difusión del mensaje que usted intenta entregar?

No, ninguno, todo lo contrario. Independientemente del poder adquisitivo que cada persona posee, es gratificante saber que mi obra está en un lugar donde la aprecian, y son parte de su vida, es una micro-difusión.

¿Quisiera agregar algo a esta entrevista?

No, sólo me gustaría que vayan a ver la exposición, y opinen.

Le agradecemos mucho la amabilidad y paciencia que ha tenido con nosotros.