Santiago de Chile. Revista Virtual. Año 8

Número 82 Abril 2006

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SOLIMÁN LÓPEZ y la exuberancia tonal

Desde España, Francisco Arroyo Artista Plástico / Crítico Independiente

Exaltaciones coloristas en constante fluctuación en el espacio, organizadas en grupos y desarrolladas en un conjunto sustancialmente abstracto compiten con trabajos minimalistas, básicos de concepción y tonalidad, aunque no por ello de menor calidad.

Destacable utilización de la técnica mixta, la cual da todo el sentido a la materia, a la composición y al mensaje que el autor pretende difundir.

Diferentes mundos entrelazados, sentimientos que explotan en una exuberancia tonal que atrapa ciertamente al contemplador.

Marcados relieves en la mayoría de los casos afrontan todo un proceso metamórfico que lleva al autor a formar parte de su propio trabajo, a desarrollar o plasmar sus "miedos" mediante la inclusión de elementos gemelos cercanos a él.

Enmarañados laberintos conjugan la idea de desasosiego social, la visión particular del creador ante la sociedad actual. Se puede decir que todo su trabajo muestra una postura latente, pensamientos, razonamientos y expectativas sociales.

La estructuración global afronta todo un reto conceptual, en cuanto a búsqueda lineal y uniforme se refiere. El camino va firmemente marcado por el desafio que conlleva una consolidación real entre formas y materias, una representación vivazmente encaminada a reflejar la figura del "yo" individualizador e inmortal dentro de un espacio globalizador, dentro de un universo "no propio" que el autor pretende asimilar como suyo, a la vez que queda firmemente asentada la idea del razonamiento y expresión comunicativa no verbal.

La base se fundamenta en la idea de ver si el espectador será capaz de asumir para sí esos contenidos, conceptos e indicaciones visuales que el creador le muestra mediante el envío o transmisión de efectos coloristas certeramente elaborados.

Al contemplar dicha obra nos encontramos inmersos en un juego tonal en el que el autor propone y el contemplador percibe y da respuesta sincera, su concepción más conceptual de lo que se representa.

Uniformidad y lucha constante es el pilar fundamental de desarrollo en la obra de Solimán López.

 

 

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