Santiago de Chile.
Revista Virtual.
Año 1.
|
|
Número 3.
12 de Marzoal
12 de Abril
de 1999.
|
El Destino
(Basado en una historia
india)
Un Sultán acompañado
por su Visir.
al monte iban de cacería
Pronto, el monarca,
una presa levanta,
un jabalí desatento,
que sorprendido, lejano
y curioso
contempla entre la floresta.
El sultán levanta
su arma y dispara.
Ésta que descompuesta
estaba,
en vez de botar a la bestia
le hiere a él en
el pulgar.
Quejándose estaba
el patriarca
En tanto su ministro lo
consolaba:
Majestad, le decía
nunca sabemos si lo que
nos sucede,
es malo o es bueno.
El Sultán, sintiéndose
burlado, enojóse
y viendo un profundo y seco
pozo,
dentro de éste
a su ministro abandonó
(a fin que en él
muriera,
de hambre o de sed)
y siguiendo luego su camino.
sólo en el bosque
se encontró.
Rodeado por una partida
de salvajes
pronto fue capturado,
hecho prisionero,
y con delicadeza,
Su Alteza, secuestrado.
Llegados a cierto lugar,
fue en seguida
al Sacerdote presentado.
Urgente, una víctima
humana,
como sacrificio a las deidades
se precisaba.
Colocado ante el Hechicero,
fue por el Mago examinado
y enseguida olvidado.
La herida en su mano lo
hacía,
de ser ofrenda indigno.
Una vez libre, el Sultán,
remembraba
de su Visir las palabras
condenadas.
Remordimientos y Culpa
(Amigas que siempre marchan
juntas)
su corazón atenazaba
y los pasos al Sultán
obligáronle a desandar.
Una vez que a salvo a su
Visir puso,
sinceramente ante él
se excusaba,
reconociendo como sabias
y atinadas
sus palabras que el tiempo
confirmaba.
El Visir, atentamente lo
escuchaba
Para luego retrucar:
Majestad, el que humilde
agradece es otro.
Si juntos de caza hubieremos
seguido
ambos apresados habríamos
sido
y como mi mano intacta hubiere
estado,
al sacrificio -víctima
apropiada-
hubiere llegado.
Majestad, nunca sabremos
si lo que nos sucede,
es en verdad malo o bueno.
Por Juan
Cortés Araya.
Busco
Busco un lugar donde pueda
explicar mis sentimientos
donde pueda decirte
al oído
te quiero.
Busco un momento en que
pueda estar contigo
a solas
tocarte y besarte
sin miedos
ni aprehensiones con
amor
y pasión.
Busco en ti a alguien
que comparta conmigo
mi vida
que sepa que en ella
hay intensidad y explosión.
Busco un cambio
un cambio para el
mundo
para ayudar a la gente
y aliviar las miserias.
Por: José
Luis Cortés.
Ago'97
Llanto
por los Desaparecidos.
Rastreando tinieblas con
guzanos
la noche llegó junto
con tristezas
y sombras espejadas presentí
en los labores lúgubres
del luto.
La oscuridad no vive sólo
en noches
ni el día só
lo muestra claridad
porque el brillo no teje
privilegios
a quién es olvidado
en las mazmorras.
En este húmedo y
exiguo rectángulo
mi cuerpo escuálido
no se revuelve
y este zuarte, mi fétido
papiro,
fue todo que restó
de mi piel gráfica.
La pluma en que se raya
esa escritura
con tinta temperada de mi
sangre
sale del leve látigo
de plomo
imprimiendo la furia del
verdugo.
Mis compañeros en
la oscuridad
son ratones muy ávidos
al acecho
de mi sueño, o del
fugaz error,
y así seré
murciélago vibrátil.
Pues bicho en fin me siento
conviviente
y por osmosis soy particionero
no sólo en apariencia
sino cómplice
de ese soturno clan de encarcelados.
Mis centinelas son las cucarachas
siempre atentas a las botas
pulidas
esas mismas que achuchan
uñas, dedos,
como celoso oficio de nobleza.
Hoy es día de picana
y pau-de-arara
mañana será
día de masajes:
ágiles cachiporras
bailarines
ablandeciendo el lomo con
porrazos.
Pero el tiempo hace la hora
agotarse
y el silencio se anida en
la garganta
como fiera acosada en la
caverna
que no se entrega fácil
a la muerte.
Morir es accesorio de uso
blando:
- un zapato gastado que
no zarpa
- piedra lejana de sonido
lejos
- barca en las olas de ensuciados
vientos.
Así, la viajera ni
me asusta,
con su gadaña de
asépticos huesos,
porque muerto ya estoy como
otros vivos
que no avistan, no andan,
ní siquiera oyen
con viva identidad y con
viudas
que repiten como el cuervo
de Poe:
¿Dónde están?
¿Dónde están? Dónde estarán?
En la ansia de decir: Nunca
más. Nunca!
OFRENDA
Salve madres de la plaza
de Mayo
Salve clarices y benditas
sean
Por la escritura y voz de
Vlado y Jara
Porque de rodillas no se
quedaran
Ahora ya es hora de exigir
por Rubens y Meirelles y
otros tantos:
lluvias en busca de lechos
tranquilos
tejida serenidad más
que justa.
Por: Anibal
Beça
Datos biográficos: ANIBAL
BEÇA és poeta brasileño de la nueva generácion.
Este año participa como invitado del IX Festival Internacional
de Medellín, como único representante del Brazil. En 1995,
con su libro "Suíte para os Habitantes da Noite" ganó
el primer hogar del VI Premio Nestlé de Literatura Brasileira.
Esta es su primera tentativa en escribir directamente en castellano.
www.secrel.com.br/jpoesia/abeca.html
Esperamos Su Opinión. |
|
¿No está suscrito?
Suscribase aquí.
|
|